martes, 13 de mayo de 2008

Época de cambios. Unos se van y otros se quedan.

Existen miles de razones para cambiar. Encontramos al mismo tiempo, miles de asuntos que son susceptibles de cambio. Por último, hay miles de direcciones en las que cambiar cada uno de esos aspectos. El resultado que encontramos pues, no es otro que miles de millones de posibilidades, de caminos potenciales, sin introducir todavía en la ecuación la más que probable simultaneidad de dos o más cambios interrelacionados y casi siempre interdependientes.

La categorización de razones, dimensiones, direcciones y signo del cambio requeriría le elaboración de un ensayo que sinceramente, escapa tanto a mis capacidades como a mis conocimientos. Sin embargo puedo atisbar una serie dicotomías básicas que nos ayuden a diferenciar los diferentes tipos. Son reduccionismos pero espero que me lo perdonéis.


Voluntarios-Involuntarios
Endógenos-Exógenos
Contingentes-Incontingentes
Superficiales-Profundos
Reversibles-Irreversibles
Progresivos-Regresivos
Suaves-Drásticos
Esenciales-Accesorios


Podríamos seguir con la lista hasta el infinito e incluso elaborar complejas matrices y mapas pero tengo muy poco de Ortega y menos de Gasset.

En el último mes hemos asistido a dos ejemplos de cambio por estos lares. Dos personas distintas.

El primero de ellos se definiría así: involuntario, exógeno, incontingente, profundo, irreversible, regresivo, drástico y esencial.

El segundo lo calificaría de: voluntario, endógeno, contingente, superficial, reversible, progresivo, suave y accesorio.

Dos cambios tan opuestos como pueden ser. Y sin embargo con iguales resultados: desvío hacia una nueva senda, un nuevo futuro; fin de ciclo. Son las paradojas de la vida que, con estímulos opuestos, es capaz de provocar reacciones idénticas en cuanto a balance final.

En cualquier caso: ¡Amigo, compañero, hermano! Estamos contigo y tú con nosotros. Te echaremos de menos. Pero antes, la celebración, la risa y el desierto. Gracias por todo.

5 comentarios:

Joe dijo...

Bienvenido al libre albedrío...

Eso es bueno, ¿no?

Conclusión: Es urgente que reparemos el aire acondicionado del coche. Nos está pasando factura!!!

Voy a matar a Flanders... uyyyyyy!!!

Jotaele dijo...

Creo que el freón se ha acabado porque lo hemos inhalado poco a poco cada día.

Sin tele y sin cerveza JL pierde la cabeza.

-=Tekena=- dijo...

Que críptico todo...
¿podrías hacer un post para torpes?

Jotaele dijo...

es que tenía que ser críptico. No podía dar detalles. Un día de estos le preguntas a destructor por el pipas y que te cuente

-=Tekena=- dijo...

jodeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeer

creo que lo críptico de la situación no me deja poner mas.